La que muestro a continuación es una de las colecciones de cromos que más me gustan de todas las que tengo. Editada a finales de la década de 1980, la conservo como oro en paño desde mi infancia. Debido a que ni el álbum ni los cromos llevan ningún año impreso, resulta muy complicado asignarle uno exacto, aunque debe datar de 1988 o 1989. Aunque tengo todos los cromos pegados en el álbum (compuesto solamente por dos hojas de papel, por lo que carece de cualquier atractivo), he preferido compartirlos de manera individual, pues además los he restaurado todos para que luzcan de la mejor manera posible.
Actualmente se ha convertido en toda una joya del coleccionismo de cromos y sobre todo de los cromos de temática terrorífica. La colección, compuesta por treinta y seis cromos, presenta ese toque antiguo, tan de los 80, cuando se hacían este tipo de ilustraciones dibujadas a mano, con ese encanto único.
El álbum, que acusa signos de uso y paso del tiempo (lo que viene a demostrar lo mucho que lo disfruté de niño) lo tengo incompleto a falta del imposible cromo de
Tigorr, aunque aquí sí lo incluyo. Para más información sobre este y otros álbumes relacionados con los monstruos y el terror, puedes consultar el
número 12 de la revista online
Figuras En Acción. En
esta entrada comparto la baraja de cartas que
Naipes Milano editó posteriormente con las imágenes de estos mismos cromos, pero en esta ocasión en forma de cartas para jugar.
