Tras el descubrimiento, hace algún tiempo ya, de dos de las figuras de PVC más raras y difíciles de conseguir del catálogo de Comics Spain, los perritos Tibi y Dabo (hembra y macho, respectivamente), las mascotas del parque de atracciones Tibidabo, me ha parecido interesante recopilar material basado en su imagen.
Pero antes, me apetecía incluir aquí este texto extraído directamente de la web de este mítico parque de atracciones, situado en la montaña del Tibidabo, perteneciente a la sierra de Collserola, al oeste del municipio de Barcelona, cuya inauguración oficial tuvo lugar el 29 de octubre de 1901. Como, por proximidad temporal, solo me quiero centrar en las décadas de los años 80 y 90, este será el período que reseñe, pues es en la década de 1990 cuando se crean estas dos mascotas.
La década de 1980 se caracteriza por una modernización de las instalaciones y por cambios constantes. Se incorporan muchas atracciones, como un Supertobogán y su remonte Trans-Móvil, Cine 180, La Noria (Panorámico), Super Barca-Choc, Tibi-trenes, Camas elásticas, Billagolf, Setidabo, Nave Cósmica, Twister, Moto Schoppers, etc. Durante esta década también se realizan emocionantes espectáculos acrobáticos, se crea el Museo de Autómatas y se hace una exposición de serpientes venenosas. Por otra parte, a partir de 1986, el parque de atracciones se rodea con una valla y se pasa a cobrar la entrada, hasta entonces gratuita, esperando una gran reforma que se producirá a partir de 1988 con la compra del parque de atracciones por parte del empresario Javier de la Rosa, quien, más adelante, creará el holding Grand Tibidabo. Al año siguiente se emprende una reforma integral con la eliminación de atracciones y la incorporación de otros puntos de ocio. Así, abría en 1989 un nuevo Tibidabo con el sobrenombre de La Montaña Mágica (La Muntanya Mágica) y con las atracciones Diavolo, Piratta, Carrusel de dos pisos o Aladino, como diversiones estrella del recinto.
A partir de 1990, el parque de atracciones también mejora los servicios de restauración y sigue aumentando el número de atracciones: el Tibidabo Express, Alaska, el Castillo Misterioso, Aeromagic (que antes era el Ferrocarril aéreo), Barkitos, Hurakan, la Mina de Oro, etc. Espectáculos como el Marionetarium o el Pasaje del Terror (actual Hotel Krüeger), fiestas anuales como «Un Estiu sense Barreres», «La Cançó de Pau», etc., así como dos nuevas mascotas: Tibi y Dabo. A pesar de todo, a finales de los años 90 la empresa sufre una larga crisis, tanto de gestión como económica, que pone en peligro su existencia e incluso provoca su cierre durante algunos periodos del año. La situación se va volviendo insostenible hasta producirse la quiebra de la sociedad en 1999, año en el que paradójicamente se celebra el centenario de la fundación del parque de atracciones.
Si bien las dos figuras de PVC mencionadas, las cuales no tengo, se podrían considerar los artículos estrella de la campaña de marketing y de merchandising relacionada con ellas durante aquella época, también existen otros artículos comercializados con la imagen de estas dos mascotas que, sin ser tan complicados, no son frecuentes de ver y a mí, desde luego, me resultan muy bonitos. En mi colección cuento con una pegatina circular, un pin metálico y un llavero de plástico transparente con el interior en papel. Tengo constancia de la existencia de otros pins y de otros llaveros distintos pero, por ahora, yo cuento con estos que muestro aquí.
